
Foto: AdobeStock
ECONOMÍA & FINANZAS
INVERTIR: ¿HIPOTECARIO O TIMESHARE?
POR PAULINA MONET
10 de junio de 2025
Copropiedad fraccionada, tiempos compartidos, arriendo o crédito hipotecario: las opciones se multiplican, pero no todas brillan con la misma claridad. Antes de firmar, infórmate. Tu libertad, tu dinero y tu estilo están en juego.
En la era de los destinos soñados y los estilos de vida aspiracionales, cada vez más mujeres consideran invertir en una segunda vivienda. Ya sea para vacacionar, proyectar patrimonio o generar ingresos por arriendo, las opciones se han diversificado. Pero qué conviene más: ¿un crédito hipotecario tradicional, un modelo de copropiedad fraccionada o un esquema tipo timeshare?
A simple vista, las propuestas de “compra compartida” parecen atractivas: bajo costo inicial, acceso a propiedades de lujo y promesas de administración sin preocupaciones. Pero como todo en la vida, los detalles marcan la diferencia.
CRÉDITO HIPOTECARIO TRADICIONAL: CONTROL Y PROYECCIÓN
Adquirir una segunda vivienda mediante un crédito hipotecario tradicional puede parecer un paso grande, pero ofrece beneficios concretos: propiedad exclusiva, libertad de uso, valorización directa del activo y posibilidad de arriendo. En este modelo, tú decides cuándo usarla, cuándo arrendarla o venderla, y en qué condiciones.
Si bien requiere mayor inversión inicial y solvencia, el compromiso es claro y el control total. “La plusvalía del inmueble es 100% del propietario. No se comparte, no se negocia con terceros ni se está sujeta a acuerdos de uso colectivo”, explica Claudia Pizarro, asesora en inversiones inmobiliarias.
COPROPIEDAD FRACCIONADA: UNA TENDENCIA CON LETRA CHICA
Algunas empresas han traído a Chile el modelo de copropiedad fraccionada, en el que se compra un porcentaje (1/8, 1/16) de una casa de lujo. Cada fracción da derecho a algunas semanas al año y todo es gestionado por la empresa: mantención, limpieza, reservas.
Suena ideal, pero hay que leer con atención. Las reglas de uso, los gastos comunes, las restricciones de fechas y la dificultad para revender la fracción pueden convertirse en un problema. “Este modelo no es propiedad exclusiva ni arriendo. Está en una zona gris que no todos entienden bien”, advierte la abogada especializada en bienes raíces Natalia Ruiz.
Añade que, en algunos casos, los contratos no están plenamente regulados bajo la Ley de Copropiedad Inmobiliaria chilena. “Hay que exigir claridad sobre las responsabilidades del administrador y el sistema de reparto de turnos. Si no hay buen manejo, puede haber fricciones importantes”, agrega.
TIMESHARE: EL MODELO MÁS CUESTIONADO

Foto: AdobeStock
El modelo de tiempo compartido, popular en los 90, permitía acceder a una semana de vacaciones al año en una propiedad determinada, a cambio de un pago inicial y una cuota anual. Sin embargo, la promesa no siempre fue cumplida. De hecho, organizaciones de defensa al consumidor han registrado cientos de quejas por promesas incumplidas, dificultad para usar las semanas adquiridas, y alta rigidez para cambiar fechas o destinos.
“El problema no es solo financiero. Es el nivel de frustración y rigidez que genera este tipo de contratos”, señala el SERNAC en sus reportes históricos.
ARRIENDO VACACIONAL: LIBERTAD SIN ATADURAS
Para muchas mujeres, arrendar cuando se quiere y donde se quiere sigue siendo la mejor opción. Plataformas como Airbnb o Booking permiten elegir, comparar, planificar con flexibilidad y evitar compromisos a largo plazo. No hay letra chica ni gastos comunes. Sí hay libertad.
¿ENTONCES, QUÉ CONVIENE?
Todo dependerá de tus objetivos, tu presupuesto y tu estilo de vida. Si buscas construir patrimonio y tener control total, el crédito hipotecario tradicional sigue siendo la opción más clara y segura. Si solo quieres vacacionar, sin ataduras, el arriendo vacacional ofrece flexibilidad y control de presupuesto.
Lo importante es informarse. Porque para tomar decisiones inteligentes sobre tu tiempo, tu dinero y tu libertad, necesitas tener todos los datos sobre la mesa.